El estilo clásico sigue manteniéndose como uno de los más demandados. Si bien, en los últimos años, hemos asistido al auge de estilos como el minimalista o el nórdico, el estilo clásico transmite un aire solemne, encantador y cálido que sigue conquistando con el paso de los años.
El estilo clásico bebe de fuentes barrocas para crear un tipo de decoración caracterizada por la calidez, la elegancia y la sofisticación. Es un estilo muy reconocible, donde la madera es la reina de los materiales. Maderas de roble, haya, caoba y cerezo son las grandes favoritas para impregnar calidez en los hogares.
Los muebles que caracterizan a este estilo tienen un carácter propio. Suelen ser de grandes dimensiones, especialmente los aparadores o los recibidores, y, en ocasiones, suelen combinar la madera con mármol. De igual manera que, en el estilo industrial, no pueden faltar muebles como las sillas tólix, hay ciertos muebles clásicos que no pueden faltar en la decoración de este estilo y que, con el paso del tiempo, son cada vez más difíciles de encontrar.
A continuación, os contamos qué tipos de muebles clásicos existen y cuáles son sus características, para que aprendáis a reconocerlos y apreciarlos a simple vista.
Sofás
Los sofás clásicos son uno de los grandes ejemplos de cómo el estilo clásico puede combinar a la perfección en comedores de decoración moderna. Debido a la amplia variedad de modelos, colores y formas, podemos encontrar el sofá de estilo clásico adecuado para cualquier salón.
Una de las principales características de los sofás clásicos, es el tapizado. Ya sea liso o con algún estampado, los tapizados suelen estar presentes en los sofás clásicos, a juego con las fundas de los cojines, creando un conjunto muy homogéneo. Así mismo, suelen presentar brocados, terciopelos, sedas o moire.
Los sofás clásicos se caracterizan por sus grandes dimensiones y su comodidad. Incluso aquellos que, únicamente, cuentan con dos plazas, hablamos de sofás amplios. Además, resaltan mucho por sus cualidades estéticas, resultado de sus laboriosas formas curvas y elegantes.
Mesas
Dentro del estilo clásico, podemos distinguir entre: mesas de comedor, mesas de centro o mesas de televisión.
Las mesas de centro clásicas suelen emplear la madera de cerezo, caracterizada por su precioso color rojizo y lo atractivo de su vetado, convirtiéndola en una madera muy ornamental. Las mesas de centro pueden ser de diversas formas, pero siempre de apariencia maciza y robusta. En el caso de las mesas rectangulares de centro suelen incluir un cristal, dotándolas de un plus de elegancia y sofisticación.
En cuanto a las mesas de comedor clásicas, suelen presentar las patas torneadas, en línea con el estilo barroco. Si por algo se caracterizan estas mesas es por su elegancia y sus grandes dimensiones. Como materiales, se emplean maderas nobles que proyecten un espacio de lujo y calidad.
Las mesas de televisión se caracterizan especialmente por su robustez y sus detalles en la talla de la madera. Suelen incorporar tiradores dorados en las puertas y cajones, un elemento funcional, pero a la vez decorativo que confiere elegancia a la pieza. En el caso de presentar patas, estas suelen lucir torneados muy laboriosos y elaborados.
Sillas de comedor
Uno de los rasgos más reconocibles de las sillas de comedor clásicas es el respaldo de medallón y las patas torneadas, todo un reflejo de la elegancia de este estilo. Al igual que los sofás, la tapicería es, también, un elemento muy importante en las sillas de estilo clásico.
El material empelado es, como no podía ser de otra manera, la madera, la cual suele estar tallada, sobre todo en las patas y en los reposabrazos, si presentara. Las patas de la silla suelen presenta formas curvas, muy barrocas.
En cuanto a los asientos, se caracterizan por ser muy cómodos y abultados, recubiertos por preciosas telas.
Recibidores
Un mueble recibidor clásico emana las mismas características que el resto de muebles de su estilo: elegancia, calidad y calidez.
Se pueden encontrar de varias formas y diseños, aunque el más reconocible es el recibidor estilizado, de patas curvas que enmarcan el cuerpo principal del mueble. Este presenta un cajón decorado por unos preciosos tiradores dorados. La madera empleada suele ser cerezo, por sus capacidades decorativas y su facilidad para tallar.
Los recibidores o consolas son muebles indispensables en las casas de estilo clásico.
Aparadores
Los aparadores clásicos, por sus dimensiones, son muebles majestuosos y elegantes, que no pasan desapercibidos en la habitación en que se encuentren. Otorgan una gran calidez y presencia al entorno. Su funcionalidad, capacidad decorativa y adaptabilidad a los diferentes estilos, lo convierten en uno de los muebles top de cualquier hogar.
Los aparadores clásicos están realizados en madera, especialmente de caoba o cerezo, e incluyen detalles dorados en sus tiradores. En caso de presentar patas, siguiendo las influencias barrocas, lucen tallas y formas redondeadas, concediéndoles una gran elegancia.
Vitrinas
Uno de los muebles más reconocibles dentro de este estilo son las vitrinas.
Las vitrinas clásicas tienen, como función principal, el almacenaje de artículos delicados, ya sean teléfonos antiguos, joyas, libros o, más comúnmente, la vajilla más preciada de la casa. Por su propia función, las vitrinas han sido siempre objeto de reverencia y cuidado. Si, además, las dotamos de estilo clásico, tenemos un mueble que acapara todas las miradas.
De grandes alturas, las vitrinas clásicas son una combinación exquisita de la cálida madera y el frágil cristal, potenciando, todavía más, su condición de lujo y elegancia. En su interior, presenta baldas que suelen ser, también, de cristal.
Estamos ante uno de los muebles más elegantes del estilo clásico, auténtico protagonista de innumerables salones.
Espejos
Los espejos clásicos se caracterizan por las molduras y las formas redondeadas. Tienden a ser de grandes dimensiones y, especialmente, de formas cuadradas o rectangulares.
Los marcos adquieren una enorme importancia en los espejos clásicos ya que, en ellos, se despliega toda la decoración del espejo. Tallas y lunas biseladas presentan acabados magníficos y elegantes, aportando lujo a cualquier espacio.
Son el complemento perfecto para los recibidores, y suelen colocarse encima de ellos.
Zapateros
Los zapateros clásicos tienden hacia la verticalidad, presentando, en ocasiones, dos o tres puertas en altura, las cuales pueden ser abatibles. Están realizados en madera, como manda el estilo clásico, aunque no presentan tanta talla o decoración como hemos visto en el resto de muebles del estilo.
La madera y los tiradores concentran toda la ornamentación de un mueble macizo, resistente y de gran funcionalidad para cualquier recibidor.